Este verano no ha sido fácil comprar verdura y fruta a un precio asequible, pero a finales de julio, estuve en Valencia en un mercado en el que solía comprar a menudo. Como hacía tiempo que no iba, pude comprobar los cambios que se han producido. Alguna parada ya no existe y otras han cambiado de dueños, pero los precios con respecto al mercado al que voy aquí, que no deja de ser de pueblo, siguen estando mucho mejor. Aproveché y compré en la parada que antes era la más cara porque seguía siendo la de mejor calidad y ahora, a mejor precio que aquí. Volveré seguro porque todo lo que compré era de buena calidad.
En esa compra me traje tomates de verano, rojos, maduros, perfectos y a un euro. Parece ya ciencia ficción ¿verdad? Cogí unos pocos y como estaban maduros y cuesta más pelarlos, facilité el proceso ayudándome con el microondas y en muy poco tiempo. Igual los que me seguís, sabéis de sobra cómo hacerlo, pero como ya tengo comprobado que cuando publico recetas o trucos demasiado fáciles, justo son las entradas que más visitas tienen.
Pasado un mes, teniendo ya esta entrada editada, me vino la duda. Había comprado en esta ocasión tomates en rama cuya piel no tiene nada que ver con los de verano, es mucho más gruesa. Esa duda me obligó a volver a hacer la prueba para poder publicar la doble prueba contando con sinceridad ambos resultados. Lo que no debo dejar de explicar previamente es que los tomates no se tienen que cocer, tan sólo ablandarse un poquito para poder pelarlos. Sabéis que lo tradicional es poner agua a hervir e introducir rápido los tomates en los que ya hemos hecho un corte. Es justo eso, pero sin agua caliente, sin olla y mucho es más rápido.
¿Qué
ocurrió? Os lo explico más adelante.
¡Ah! que se me ha olvidado estamos a 15 y es el día en el que junto a mi querida amiga Elisa, Que no te falte un perejil, iniciamos nuestro proyecto En buena Onda. Seguimos con mucha buena onda en la distancia, compartir lo que aprendemos es nuestro leitmotiv, siempre agradeciendo a las amigas que participan y por supuesto a los que nos visitáis, que no sois pocos.
Ella nos ha preparado una receta que solamente con el nombre, os va a sorprender tanto como a mí, Boloñesa de lentejas. Seguro que nos apuntamos a probarla.
Si os interesa las recetas del mes de agosto pinchad aquí. Gracias por seguirnos y por vuestra participación.
Pinchad en el siguiente enlace que os dirige a los recopilatorios de cada mes para que podáis acceder fácilmente a todas las recetas presentadas en 1 +/-100, desperdicio 0 y En buena onda desde su inicio. Nuestra página de Facebook la tenemos abandonada porque nos crea problemas de publicación por eso, también os podéis pasar por nuestra cuenta de Instagram. Os invito a participar.
En esta foto se puede ver mejor el corte que les hice.
Ingredientes
- Tomates (dependiendo del tamaño del microondas y de vuestras necesidades). Yo puse 5.
Proceso
- Lavar los tomates y hacerles con la ayuda de un cuchillo un corte en forma de cruz pero que no sea superficial. Colocarlos en un plato apto para el microondas. Programar intervalos de 10 segundos a 750 W. Como cada microondas es un mundo y los tomates tienen diferentes tamaños y la piel puede desde muy fina a bastante gruesa, es mejor comprobar si la piel se desprende tras esos 10 segundos y evitar tal y como he indicado más arriba, que se cocinen.
- Cuando veamos que se desprende fácilmente, sacar el plato con los tomates y pelarlos en seguida. No tienen que quemar.
Hasta aquí, lo que había escrito tras probar con los tomates jugosos de verano. Ahora os cuento el resultado de la segunda prueba utilizando el mismo microondas e igual potencia, pero con los tomates en rama y de piel más gruesa y dura.
- Hice el corte más alargado y un poco más profundo colocando los tomates con el corte hacia arriba. Después, programé intervalos de 10 segundos a 750 W. Lo que ocurrió fue que la parte del tomate con la cruz no había forma de que se desprendiera y seguía frío pero en la base, el tomate empezó a cocerse y quemaba. Programé 10 segundos diez veces y ahí ya tuve claro el resultado.
Conclusión: Si los tomates son de piel muy dura y gruesa, no vale la pena utilizar el microondas, podemos comprar un pelador especial para tomates, que los hay muy buenos o utilizar un buen cuchillo afilado que también nos será de utilidad, aunque el tiempo invertido y el trabajo realizado, será mucho mayor. También nos ensuciaremos y ensuciaremos mucho más.
Espero que esta entrada os sea de utilidad y que en verano no dudéis en comprar buenos tomates para pelarlos en muy poco tiempo.
Bon profit!
Hola Marisa, pues claro que tus entradas son útiles, nos hablas de los pros y contras de tus recetas, así vamos a lo seguro y no nos enfadamos pensando que a nosotras no nos sale. Si son maduros merece la pena, si son de rama con piel más dura, no. Espero haber aprovechado bien la clase.
ResponderEliminarUn beso.
Buenas tardes Marisa, todos tus experimentos son de agradecer, especialmente para cocineros noveles, más difícil es cambiar el chip para las que tenemos experiencia o costumbre de hacer las cosas de determinadas maneras, pero nunca viene mal tener en cuenta tus consejos por si acaso.
ResponderEliminarLo de los precios de mercado, nos trae de cabeza a la mayoría, y más a quienes que nos dedicamos a compartir nuestra cocina. Sin caer en la mediocridad, ni en el derroche, hay que tener presente que quien nos lea puede buscar algunas alternativas para comer bien, sin excesos, en todos los sentidos.
Besos y buen fin de semana.
Siempre son útiles cualquiera de tus entradas, te explicas muy bien y eres totalmente fiable, así que como nunca he pelado los tomates en microondas me viene genial que nos lo expliques con todo lujo de detalles. Un besito.
ResponderEliminarNo están de más tus consejos, utilizar el microondas para escaldar tomates seguro que le va bien a alguien. A mí me pasa como a Concha, ya tengo mis costumbres y me resulta difícil cambiar, además suelo hacer mucha cantidad y sinceramente no me resulta práctico el micro, pero para pocos tomates me parece buen método. Lo tendré en cuenta si se presenta la ocasión.
ResponderEliminarMuy buena, práctica y sincera la comparativa. Un beso.
Hola, Marisa: pues a mi me vienen muy bien tus consejos porque ya la líe parda cuando quise hacer el tartar de tomate. Así que seguiré al pie de la letra tus instrucciones jajaja. Besos, guapa.
ResponderEliminarEs buena idea, bastante más rápida que cocerlos en agua y a veces para dos o tres que quiero poner en un guiso y no encontrarme la piel, va de maravilla, lo probaré aunque si son de piel gruesa como dices y no salen igual podríamos probar en un bol con agua y al micro? bss!
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