Los albaricoques que más me gustan no los suelo encontrar fácilmente y mucho menos, maduros. Compré cuatro kg también valencianos pero anaranjados y con los que quedaban, preparé esta coca y una mermelada.
Compré unas claras pasteurizadas sin saber muy bien qué iba a hacer con ellas aunque la idea de un bizcocho rondaba por ahí. Al final, elegí esta receta muy popular en el mundo TMX y la adapté a mi gusto y a la freidora.
Siempre hay berenjena en casa y en verano nunca dejo de asarla junto con pimientos y tomates. Es el Espencat valenciano , una receta tradicional y con recuerdos adosados. También tengo publicada la Conserva d’espencat .