Es verdad que publico dos recetas seguidas que son muy similares, pero mi nevera manda y mucho más de lo que desearía y como en esta casa no se tira nada, la revisión asidua es de obligado cumplimiento.
Es difícil acostumbrarse a comprar poco sobre todo cuando voy al mercado y veo buenos precios. Mi nevera es generosa y me “cuida” generosamente las frutas y hortalizas cuando son frescas pero tras quince días en el cajón más estupendo de todos, un trozo de calabaza carruécano, estaba empezando a perder su buena pinta. Enamorada como soy de la calabaza y no queriendo prepararla de nuevo frita, me puse a pensar. No había suficiente para hacer una creme, tampoco me apetecía y me pareció adecuado sofreírla con otros ingredientes que estaban también demandando acompañar al carruécano. Una vez listo, abrí el armario alacena y me encontré con seis o siete nueces, busqué unos moldes tipo flanera y a partir de ahí, surgió la receta. ¿Qué tiene de novedoso? Todo el mundo sabe cuánto me gustan los pasteles o flanes salados y cuando tuve claro que no cabían en la freidora nada más que cuatro, surgió la idea de utilizar el estuche para vapor que compré y que todavía he usado muy poco. Al llevar una pequeña bandeja que deja pasar el vapor, es fácil cubrirla con un trozo a medida de papel sulfurizado y probar a ver qué tal salía el pastel.
Tenía de nuevo un gran lío montado en la cocina con dos aparatejos enchufados y en funcionamiento a la vez, fue divertido y me alegra, porque últimamente ya sabéis que he funcionado en “modo básico” o incluso peor.
Estos pasteles en flanera y el que resulta al utilizar la cocción al vapor, tienen el mismo sabor pero no la misma textura y eso que la masa es exactamente la misma, pero la cocción al vapor aporta humedad y la freidora, justo lo contrario. Aconsejo ambas formas, pero claro, la cantidad para el microondas es mucho menor y también es una excusa para aprovechar todo, todo..
Mi consejo, no poner tanta cebolleta porque se acentúa su sabor y este tipo de calabaza no es tan dulce como la que utilizo en postres. Imprescindible, si te gustan, agregar más nueces, al menos a la masa de las flaneras, no solo su sabor es de lo más agradable, también incorporamos a la preparación, sus propiedades.
Sed bienvenidos a mi proyecto 1 +/-100, desperdicio 0 de este mes de mayo, pero también al haber utilizado el microondas, estos pasteles se van a añadir a mi otro proyecto, En buena onda, el que comparto con mi amiga Elisa. Si os apetece ver qué cositas aprovechamos o reciclamos en abril, pinchad aquí y si os interesa también el microondas, aquí. Estos pasteles, que no flanes, son un aprovechamiento completo y la vuelta a encender de nuevo y aunque sea un poquito, mi creatividad.
Muchas gracias por las visitas al blog y a la herramienta en la que colgamos todo lo que las amigas blogueras nos regalan. Mil gracias, un mes más. Y por cierto, ¿sabéis cuántas recetas con calabaza tengo en Thermofan? Muchas.
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Pinchad en el siguiente enlace que os dirige a los recopilatorios de cada mes para que podáis acceder fácilmente a todas las recetas presentadas en 1+/-100, desperdicio 0 y En buena onda desde su inicio. Y si queréis saber en qué consisten los proyectos, pinchad en los enlaces o en los logos. Os invito a participar.
Ingredientes
- 2 dientes de ajo
- 90 g de cebolleta
- 150 g de puerro
- 270 g de calabaza
- 20 g de aceite de oliva
- 150 g de harina de repostería
- 1 cucharadita de levadura química en polvo
- un pellizco de sal
- pimienta molida
- 130 g de leche
- 40 g de aceite de oliva virgen extra
- 2 huevos M
- nueces
* 1 trozo de papel de hornear
Antes de empezar…
- Pelar los ajos y cortarlos por la mitad, quitando el germen si lo tuvieran. Quitar la primera capa de la cebolleta y del puerro, cortarlos en trozos. Quitar la piel a la calabaza después de cortarla en trozos no muy grandes.
- Tamizar la harina y la levadura. Reservar.
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Preparación en TMX
- Poner los ajos, la cebolleta, la calabaza y el puerro en el vaso. Agregar el aceite y programar, 4 segundos, velocidad 5. Bajar los restos con la espátula y programar, 10 minutos 120º, velocidad cuchara, giro a la izquierda.
- Incorporar la harina y levadura tamizadas, la sal, la pimienta, la leche, el aceite y los huevos. Programar, 15 segundos, velocidad 4.
Preparación tradicional
- Poner el aceite en una cazuela. Cuando esté caliente, añadir los ajos, la cebolleta y una pizca de sal. Cuando esté la cebolla blanda, agregar la calabaza y el puerro. Seguir sofriendo a fuego medio hasta que esté todo bien hecho.
- Batir los huevos un bol o en el vaso de una batidora. Incorporar la leche, la sal, la pimienta y el aceite y seguir batiendo. Incorporar poco a poco la mezcla de harina y levadura tamizadas. Remover con una espátula hasta obtener una mezcla homogénea.
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Horneado en air fryer
- Verter la mezcla en las cuatro flaneras dejando un dedo hasta el borde. Colocar trozos de nueces y una media nuez por encima. Como no me quedaban, no pude añadir demasiadas.
- Introducir los moldes sobre la rejilla de la freidora y programar, 15 minutos a 160º y 5 minutos a 140º. Utilicé el modo Bake de la Cosori Dual Blaze. Pinchar con el palo de una brocheta para comprobar que sale limpio y por lo tanto, están cuajados.
Horneado en microondas
- Verter la mezcla sobrante sobre el papel colocado en la rejilla del recipiente para vapor. Distribuir nueces por encima y tapar el recipiente. Como cada microondas es un mundo y el mío tiene cocción al vapor, os indico que programéis intervalos de un minuto a 800 W. El tiempo dependerá del grosor de la masa. Yo lo tuve 5 minutos y creo que uno más le hubiera ido bien. Pinchar con el palo de una brocheta para comprobar que sale limpio y por lo tanto, está cuajado.
Notas:
- El cocinado en microondas al vapor es mejor comerlo en el día, pero así y todo, están más buenos recién hechos.
- Era la primera vez que utilizaba las flaneras de silicona y desmoldaron de maravilla sin haberlas untado con nada. El molde también es recomendable para el uso que le di siempre teniendo en cuenta que no se puede poner mucha cantidad en la bandeja.
- Le va muy bien la rúcula y el queso fresco que era lo que tenía por la nevera y que por cierto, también necesitaban uso urgente.
Bon profit!
Este tipo de preparaciones y en pequeñas cantidades me gusta hacerlo en el microondas con las flaneras de silicona o con un molde de cristal pequeño que tengo apto para microondas.
ResponderEliminarMe gustan los pastelitos que traes y el que lleve puerro me convence aún más, el sabor que le da es muy rico.
Besos.
Buenos días Marisa. A las que nos gustan los vegetales de todo tipo, ir al mercado resulta un despiporre de colores que no nos cansamos de comprar. Y también me ocurre que cuando me quedan unas pocas verduras sueltas, la salida que tienen es una tarta salada, aunque no en modo flan, sino quiche, con o sin base. Todo lo que lleve calabaza me encanta, aquí se nota que es el ingrediente mayor por la textura de los pastelitos, pura mantequilla (me estoy relamiendo). Pocas veces he utilizado el microondas en estos casos, siempre el horno, pero todo es cuestión de aprender, cada vez lo uso más, aunque sea de pinche.
ResponderEliminarDisfruta del día y de tus maravillosas y sanas recetas, sean cuales sean.
Un beso.
Buenas tardes Marisa, puedo hacerme una idea del cuadro que presentaba tu cocina, funcionando a toda máquina, porque en mi casa es el pan de cada día, y por partida doble, y ahora más, porque últimamente no necesitamos excusa para montar un sarao familiar, y raro es el domingo que no nos juntamos unos cuantos para comer, y eso genera un despliegue logístico tremendo, jajaja...
ResponderEliminarTus flanes se ven ricos, a mi me encanta la calabaza, aunque no tengo ningún flan con ella, sé que me gustaría, como comentas la suavidad que aporta es puro placer. Haces bien en compartirlos, mismos ingredientes, pero distinto resultado, plato perfecto.
Besos.
Buenas tardes Marisa. La verdad que muchas veces nos quedamos escasos de recursos hasta que la nevera nos apura ...jejeje es ahí donde empiezan las neuronas a trabajar. Me parece una idea muy buena para los poco amantes de verduras ya que se pueden camuflar y estar riquísimo como estos pasteles. que cualquiera de las dos versiones me van.
ResponderEliminarBesinos
¡¡Hola Marisa!! A mí me encanta todo lo de formato individual en la cocina y todo lo mini, así que tus pasteles a primera vista ya me encantan, y bueno, luego, con lo que lleva, aún me gustan más. Estos tipos de pasteles salados suelen llenar bastante, así que los hayas hecho en ese formato van muy bien. Ya sea en la freidora de aire como en el microondas son dos opciones estupendas. Yo le voy cogiendo poco a poco el tranquillo a la freidora de aire. Esta noche, como tengo más tiempo, voy a ver si me hago una lasaña de calabacín, queso fresco y ya veré qué más tengo para ponerle y me tocará mirar el tiempo todo el rato, pues es lo que peor llevo de la freidora, ir mirando a ver cuándo puede estar y no pasarme, pues si te pasas, la comida no me gusta como queda en la freidora. Y sabes, luego, como no suelo utilizarla a diario, se me olvida el tiempo justo que le pongo a las cosas y ya no recuerdo si eran ocho minutos o seis, así que apuesto por el que menos y me tienes como una tonta mirando y encendiendo la luz de la freidora todo el tiempo a ver si tiene pinta de estar, ja, ja. Menos mal que en la mía, por lo menos, puedes ver a través del cristal. Supongo que al final me haré con ella.
ResponderEliminarComo siempre, Marisa, un reciclaje perfecto, utilizando los electrodomésticos más adecuados para ello. Besitos.
Esos flanes se ven muy ricos Marisa sobre todo con la calabaza como estrella. Tengo que aprender a hacer mas cosas en la air fryer, me estoy viendo lenta porque solo la uso para hacer papas a la francesa.
ResponderEliminarPues te ha quedado de maravilla y las nueces le deben dar un buen toque. Muy bien aprovechado ese trozo de calabaza, a mí también me pasa que compro demasiada verdura para dos y luego tengo que gastarla rápidamente. Besitos preciosa ¡Buen fin de semana!
ResponderEliminarBuenas tardes, Marisa: te entiendo porque, cuando voy a la compra, tampoco tengo tino y vuelvo con más cosas de las previstas. Tiene delito que con lo que me gustan los pasteles salados todavía no haya hecho ninguno de calabaza y, para más INRI, tengo 6 flaneras individuales de silicona monísimas que sólo he utilizado una vez en la vida (otro capricho ocupando espacio en la cocina), así que tomo nota de tu receta apta para el microondas y cuando vea la calabaza esa, currutaca o como se llame (nunca había oído el término jajaja) me pondré a ello.
ResponderEliminarUn besazo.
Una idea fantástica para poder darle más uso al microondas y la freidora. Las dos opciones me han gustado y lo de aprovechar lo que tenemos en la nevera creo que es básico. Muchas veces nos salen unas recetas fantásticas con esos "picos" o restos que nos van quedando y que nuestra mente se empeña en mezclar para aprovechar. Besitos.
ResponderEliminarHola Marisa. Por lo que veo eres adicta a toda clase de aparatos culinarios jj. El micro lo tengo porque ya iba con la cocina jj aunque lo cierto es que solo lo utilizo en contadas ocasiones. Todo lo contrario que Elisa y tú que sois unas expertas en esas lides.
ResponderEliminarParece ser que la calabaza debe estar en el orden del día ya que en las visitas que he hecho he visto unas cuantas recetas con ella jj.
Yo no la utilizo mucho, aunque hace tiempo preparé unas magdalenas con calabaza asada y estaban muy ricas.
Estos pastelitos que has hecho tienen una pinta sensacional y como eres una experta en cocina de aprovechamiento no es de extrañar que hayas hecho estas delicias. Exquisitas.
Un abrazo y buen fin de semana.
Hola Marisa, a mí me costaría comprar poco, ademñas, siempre que veo buenos precios de productos que merecen la pena se vienen conmigo. Ahora toca cocinarlos bien para no tirar, eso se nos da bien. A la vista está que estos pasteles enamoran con verlos , comerlos sería un placer. ¡Un beso!!!
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