Ganas tenía ya de publicar otro caldo de pescado y justo el que hoy comparto es de aprovechamiento. Y más ahora que hace días que estáis viendo el Caldo ligero de pollo que preparé en el microondas. Esta vez, vuelvo a utilizar la olla rápida porque es de lo más rápida y me encanta utilizarla.
En el mercado quedan pocas pescaderías, miedo me da porque en la ciudad también han ido desapareciendo las de toda la vida. El pescado de los supermercados e hipermercados, al menos en esta zona, nunca está a la altura. Ya os comenté que en esta parada del mercado, también han rebajado la calidad y a veces te endosan pescado descongelado pero a precio de fresco y sin aviso previo. Tengo que perdonarles esos “detalles”, porque a pesar de los pesares, siguen teniendo pescado fresco variado y prefiero gastar un poco más y que disfrutemos.
Al ver que tenían cabecitas de rape reservadas para hacer caldo, porque venden las colitas por separado, pedí una mezcla de morralla y cómo no, unas galeras. Al llegar a casa, recordé que tenía congelada una cabeza y raspa de pescadilla que fueron directas a la olla. El tomate que quedaba en el cajón de las verduras empezaba a perder frescura y como me gusta añadirlo al caldo, allí que se fue directo.
Cuando leáis la preparación, veréis que sofrío bien parte de los ingredientes y es porque contribuyen a aumentar el sabor del caldo. Me gusta poner patata y me la como casi siempre caliente cuando acabo de colar el caldo. Es lo único que salvo, cosas mías. Mi olla de 6,5 l sirve para preparar más cantidad, pero mi congelador no es apto para colocar muchos tarros, suelo tenerlo a tope. A ver si la próxima compra es una nevera de esas de doble puerta… Soñemos que es gratis.
El resultado, un caldo con mucho sabor (eso no ocurre con pescado del super), espesito y perfecto para usarlo en un buen arroz o cualquier tipo de sopa o guiso. No sale mucha cantidad, la suficiente para congelar una parte y tenerla lista ya que lo peor para mí de elaborar el caldo de pescado casero, es conseguir que el olor que queda en la olla y en la casa, desparezca. Poca cosa, teniendo en cuenta lo rico que está y que no lleva ningún tipo de aditivo, ni conservante, ni sal.
Siempre, si las encuentro, me gusta añadir galeras. Está claro que ya no están a precio asequible y que habrá quien piense que es un desperdicio, pero tampoco son tantas y realmente, vale la pena.
Espero que os guste y os sea de utilidad. En la olla rápida no tardamos casi nada. La foto la hice rapidita, sin tiempo y no es nada del otro mundo, pero es que fotografiar un caldo no es nada motivante. Mil “sorries”. ¡Ah! y muchas gracias por la gran aceptación del Recopilatorio de 10 recetas con bacalao. Muchas gracias.
Pinchad en el siguiente enlace que os dirige a los recopilatorios de cada mes para que podáis acceder fácilmente a todas las recetas presentadas en 1 +/-100, desperdicio 0 y En buena onda desde su inicio. Y si queréis saber en qué consisten los proyectos, pinchad en los enlaces o en los logos. Os invito a participar.
Ingredientes
- 3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
- 1 diente de ajo
- media cebolla pequeña
- 1 tomate pequeño
- 3 o 4 ramas de perejil fresco
- 2 cabezas de rape pequeñas
- 10 galeras
- una cabeza y espina de una pescadilla
- 250 g de pescado para caldo (morralla)
- 1 hoja de laurel seco
- una patata pequeña
- 1 l y medio de agua
Antes de empezar…
- Pelar el ajo y quitar la capa exterior de la cebolla, cortar ésta en cuartos.
- Lavar el tomate y cortarlo en cuartos. Pelar la patata y cortarla por la mitad.
Preparación en olla rápida
- Poner el aceite en la olla y cuando se caliente, añadir el ajo y la cebolla. Dar unas vueltas y dejar que se sofría lentamente a fuego bajo. Añadir después el tomate, el perejil, el rape, las galeras, la morralla y la cabeza y espina de la pescadilla. Seguir sofriendo a fuego bajo y removiendo sin cesar para que no se agarre demasiado el pescado. No importa que se deshaga porque lo vamos a colar.
- Pasados unos minutos, agregar el laurel y la patata. Cubrir con el agua y cuando esté un poco caliente, tapar la olla. Subir el fuego a 8 y dejar que suban los dos anillos, bajar el fuego a 4 y programar la vitro 15 minutos. Cuando termine el tiempo, dejar que se enfríe la olla antes de abrirla.
- Esperar a que se enfríe un poco y colar el caldo. Si se quiere un poco más espeso, se puede reducir cociendo un poco más de tiempo, yo no lo hago.
- Si no se va a utilizar en seguida, congelar en un recipiente apto para ello.
Bon profit!
* Si quieres una olla más pequeña porque sois pocos, ésta de 4.5 l, va de maravilla. La que venden como Set de dos ollas, una de 6,5 l y otra de 3 l, también es una buena opción. Conozco y uso las WMF desde hace más de 20 años y no las cambio por otras marcas. Buena calidad y hay de cuando en cuando ofertas bastante interesantes.
Con la cantidad de ingredientes y la elaboración que le has puesto a ese caldo, sabor tiene de sobra. La cabeza y raspa de rape es ideal para el caldo, también se le puede quitar mucha carne entre los huesos de la cabeza una vez cocida, es entretenido, pero es muy sabrosa. Una receta de aprovechamiento de las mejores.
ResponderEliminarUn beso.
Las galeras dan muy buen sabor al caldo, la verdad es que barato hoy en día ya no hay nada, pero hemos de comer y disfrutar al hacerlo. Este es un caldo para hacerlo en cantidad y congelar para otras recetas.
ResponderEliminarBesos.
Buenos días Marisa!. Un excelente caldo para diversas recetas a cual saldrá mas buena, un surtido muy bueno para tu caldo, me encanta, yo aún lo encuentro también
ResponderEliminarDigo lo que tú como comprar en la pescadería no hay nada pero...si es verdad que van desapareciendo, el super nefasto para mi también. Las galeras cierto que se han subido pero y el caldo tan bueno que hacen.
Un fuerte abrazo.
Buenos días, Marisa: estoy de acuerdo con todo lo que dices, el pescado de los supermercados no suele ser una opción de calidad, aunque hay excepciones. Tengo la suerte de tener en el barrio una pescadería con muy buen producto (y el precio en consonancia, claro) y, aunque tienen bastante variedad, nunca traen galeras ni rapes pequeños y, mucho menos, morralla. ¡Con lo que me gusta un buen caldo de morralla! En mi casa de la playa, hago uno muy parecido al tuyo, aunque nunca le echo patata. Probaré a ver que tal. También tengo tu misma olla en tres tamaños, dos de ellas eran de mi madre y, al final, me las quedé yo porque mi hermana ya tenía y no necesitaba más. Así que para según que guisos, utilizo una u otra. Para el caldo, la más grande (como la tuya) porque no me importa estar tres días seguidos dándole uso jajaja. Eso sí, variando las recetas (risottos, sopas, cremas, curries, etc).
ResponderEliminarTambién coincido contigo en lo del frigorífico. Hubiera querido tener un frigorífico de esos americanos de dos puertas, pero cuando hice la reforma de la cocina, tuve que elegir entre este tipo de frigo o más espacio de almacenaje y gano lo último. Bueno, a fin de cuentas ahora sólo somos dos y con el que combi que tengo, salvo en ocasiones especiales, es más suficiente.
Ya no me enrollo más, jajaja. Besos y feliz Semana Santa.
Un caldito bien reconfortante Marisa!!
ResponderEliminarBesos
Hola Marisa. Con los ingredientes que lleva este caldo ya se sabe que tiene que ser pura delicia. Las galeras le gustan mucho a mi hija y se compra de vez en cuando para hacérselas, aquí celebran los restaurantes del Grao el mes de la galera, el día 5 de este mes finalizó ya que comienza a primeros de febrero.
ResponderEliminarLo que si es cierto es que le dan un sabor exquisito a todo lo que se pone, de ahí que este caldo deba estar sensacional, de los que siempre se recuerdan.
Un abrazo.
Hola Marisa, yo también suelo darle un toque de fritura a los ingredientes antes de cocerlos ya que así se potencia más su sabor😋un caldo de lo mas apetecible y rapidito de hacer👌 buenas noches y buen finde wapa
ResponderEliminarCon lo que me gustan los caldos, éste no llegaba al congelador, pues con un poco de pasta o sémola, la cena perfecta.
ResponderEliminarAquí está pasando lo mismo con las pescaderías, cada vez quedan menos y con las carnicerías vamos por el mismo camino y es que se nota que la población es muy mayor y consume menos carne y pescado. De fruterías vamos sobrados, afortunadamente, pero lo demás...
Ya sabes que uso muchísimo la olla rápida WMF, imprescindible en mi cocina.
Un beso.