El otro día era fiesta y tuve visita, íbamos
a salir a picar algo y por eso, dejé todo preparado para cocinar
lo mínimo antes de comer.
Este arroz con rebollones (pebrassos en mi casa y zona de origen) y pollo, lo hago muchas veces en otoño e invierno durante la temporada de este tipo de setas. Lo he llamado “en espera”, porque lo preparé como se solía hacer en las familias en las mujeres trabajaban en el campo. Si la jornada iba a ser larga,tenían que adelantar y preparar con antelación la comida. También la forma de cocinarlo ha sido sin maquinita alguna y a fuego lento, con tiempo y sin prisas.
En esta tierra un arroz siempre es
bienvenido. En esta tierra y en mi familia, especialmente, se
comía arroz varios días a la semana y algunos como éste o parecido, eran fijos.
Hay unas pocas recetas de arroz con rebollones
(níscalos, pebrassos, esclatasangs, rovellones...), en mi blog y cocinados de diferentes
formas, con fotos horribles, pero eso no significa que la receta no valga la pena ¿verdad? Os dejo dos enlaces de estos arroces al final de la entrada, pero hay más recetas con rebollones.
Fui al mercado y compré los rebollones
a un precio razonable. En algunas ocasiones, si veo que en alguna parada tienen a la venta trozos que han saneado y limpiado, los compro porque los voy a usar en
seguida y están más baratos. No siempre ocurre en el mercado que voy y ese día,
aunque hubiera encontrado rebollón más barato, no lo hubiera comprado porque tenían
que esperar en la nevera tres días. Los quería de calidad, enteros y sanos. Aguantaron
perfectamente (sin limpiar).
También elegí unas alcachofas y unas
judías verdes excelentes. Son las que aquí utilizamos para la paella (la ferradura).
Los demás ingredientes los tenía en casa y tocaba darles salida. El tomate era
valenciano y se estaba poniendo demasiado blando, por lo tanto, me venía
perfecto para el arroz. El pollo, aunque sólo eran tres muslos, estaba congelado desde el verano y también me servía porque no podía
usarlo solo para una receta en la que fuera el protagonista. También quedaba
muy poco arroz y no me gusta mezclar el antiguo con el nuevo. Todo listo para cocinar.
Os dejo dos formas de hacerlo "en espera". Yo prefiero la segunda ¿y tú?
Os dejo dos formas de hacerlo "en espera". Yo prefiero la segunda ¿y tú?
Este rico arroz va a pasar a la lista de publicaciones de mi proyecto 1 +/- 100, desperdicio 0 de este mes de octubre. Os invito a participar y doy las gracias de nuevo a todas las amigas que cada mes os unís.
Pinchad en el siguiente enlace que os dirige a los recopilatorios de cada mes para que podáis acceder fácilmente a todas las recetas presentadas en 1 +/-100, desperdicio 0 desde su inicio.
Y si queréis saber en qué consiste el proyecto, pinchad aquí o en el logo. Os invito a participar.
Antes de empezar...
- Quitar la piel al pollo, si así se desea.
- Quitar las hojas externas de las alcachofas, cortarlas en cuartos y colocarlas en un bol con un poco de perejil. Sacarlas del agua antes de usarlas y escurrirlas sobre papel de cocina.
- Limpiar los rebollones con un pincel para quitarles la tierra y posibles restos de hojas. Lavarlos con un poco de agua y cortarlos
en trozos no muy pequeños.
- Lavar las judías verdes y cortarlas en trozos. Si se desea, quitar con un pelador los
bordes. Al ser tan tiernas las mías, no fue necesario.
- Pelar el tomate y cortarlo menudo. Yo prefiero picarlo mucho o triturarlo.
Ingredientes
- 3 muslos de pollo campero (o más)
- 15 g de aceite de oliva virgen extra
- 5 alcachofas
- 150 g de judías verdes (ferradura)
- 1 tomate grande
- 200 g de rebollones (pebrassos,
níscalos...)
- 1 vasito de café de ron negro
- sal
- 1 cucharadita de pimentón de la Vera
- ½ cucharadita de cúrcuma en polvo
(opcional)
- 180 g (unos 4 puñados de arroz
redondo J. Sendra)
- 1 litro de agua o caldo de pollo
Preparación tradicional
1. Aquí una forma de hacerlo.
La noche anterior, incluso temprano
por la mañana, prepararemos el sofrito con todos los ingredientes y después
coceremos todo con el agua o el caldo. A la hora de comer, calentaremos
el caldo y añadiremos el arroz. Esta forma nos vendrá muy bien cuando
tengamos muy poco tiempo.
- Verter el aceite en una cazuela. Calentar.
- Cuando esté caliente, añadir el pollo y dorarlo bien, removiendo a menudo. Cuando esté dorado y bien hecho, sacarlo de la cazuela. Reservar.
- Sofreír las alcachofas en el aceite restante. Añadir después las setas y el tomate. Bajar el fuego y dejar que se vaya haciendo el tomate controlando la cocción. Si es necesario, añadir un poco más de aceite.
- Cuando el tomate esté frito, añadir las judías (ver notas).
- Es el momento de incorporar el pollo, remover todo con cuidado y seguir sofriendo unos minutos más a fuego bajo.
- Verter el ron, subir el fuego y remover unos segundos para que se evapore el alcohol.
- Añadir el pimentón y remover de nuevo cuidando que no se queme.
- Incorporar el agua o el caldo y la cúrcuma. Tapar la cazuela y cocer todo durante unos 10-15 minutos. Es mejor que tanto las alcachofas, como las judías, no estén del todo hechas porque después habrá que sumar el tiempo de cocción del arroz.
- Es el momento de apagar el fuego, tapar la cazuela y dejarla en espera. Si hace calor, mejor pasar todo a un recipiente grande con tapa e introducirlo en la nevera.
- Antes de comer, pasar todo a la cazuela, ponerla en el fuego y cuando esté el caldo bien caliente, agregar el arroz. Cocer de 17 a 18 minutos, comprobando el punto de sal a media cocción.
- Servir caliente.
2. Aquí otra forma.
La noche anterior, incluso temprano por la mañana, prepararemos sólo el sofrito con todos los ingredientes sin añadir el agua o el caldo. A la hora de comer añadiremos el agua o el caldo al sofrito, coceremos todo y cuando esté listo, añadiremos el arroz.
- Verter el aceite en una cazuela. Calentar.
- Cuando esté caliente, añadir el pollo y dorarlo bien, removiendo a menudo. Cuando esté hecho, sacarlo de la cazuela. Reservar.
- Sofreír las alcachofas en el aceite restante. Añadir después las setas y el tomate. Bajar el fuego y dejar que se vaya haciendo el tomate controlando la cocción. Si es necesario, añadir un poco más de aceite.
- Cuando el tomate esté frito, añadir las judías (ver notas).
- Es el momento de incorporar el pollo, remover todo con cuidado y seguir sofriendo unos minutos más a fuego bajo.
- Verter el ron, subir el fuego y remover unos segundos para que se evapore el alcohol.
- Añadir el pimentón y remover de nuevo cuidando que no se queme.
- Es el momento de apagar el fuego, tapar la cazuela y dejarla en espera. Si hace calor, mejor pasar todo a un recipiente grande e introducirlo en la nevera.
- Al día siguiente o cuando vayamos a comer, pasar el sofrito a la cazuela. Después, incorporar el agua o el caldo y la cúrcuma. Tapar la cazuela y cocer todo durante unos 10-15 minutos. Es mejor que tanto las alcachofas, como las judías, no estén del todo hechas porque después habrá que agregar el tiempo de cocción del arroz.
- Agregar el arroz y la cúrcuma. Cocer de 17 a 18 minutos, comprobando el punto de sal a media cocción.
- Servir caliente.
Notas:
- Como en casa no nos gusta el pollo
con hueso, antes de servir el arroz, desmenucé la carne del pollo y la añadí a
los platos. Tampoco había tanta.
- Los tiempos de cocción pueden variar dependiendo de muchas cosas:
- · El tamaño de las piezas de pollo. Al sofreírlo debemos dejarlo bien dorado y hecho para que deje ya su sabor en el fondo de la cazuela. Si queda tostadito ese fondo, mejor.
- El tipo de judías, algunas parecen tiernas y tardan mucho en cocerse, incluso quedan duras y da mucha rabia porque no son precisamente baratas. Como he indicado más arriba, si no son muy tiernas, o tenéis dudas, mejor quitar los bordes con un pelador.
- Si son muy tiernas, para que no queden cocidas en exceso, sofreírlas al principio de la preparación, sacarlas y reservarlas. Añadirlas antes de echar el arroz.
- La dureza de las alcachofas. A veces, como en mi caso, pueden ser una sorpresa. Las mías, por dentro, estaban blanduchas.
- El tipo de arroz redondo y vuestro gusto como comensales. Suele tardar unos 17 o 18 minutos. A mí me gusta hecho cuando el arroz es caldoso, pero a lo mejor a vosotros no. También dependerá del tipo de arroz siempre. Mejor seguir las indicaciones del fabricante y después, adaptar.
- Si no es temporada de rebollones, se puede hacer con otro tipo de setas, pero que tengan sabor.
- También si os gusta, podéis añadir patata chascada.
- Yo utilicé agua en vez de caldo de pollo y no se notó porque es muy importante, sofreír bien el pollo y después el resto de ingredientes.
- Las cantidades que os indico son también adaptables.
Bon profit!
Os dejo los enlaces a otros arroces con rebollones.
En casa también hemos sido mucho de arroz, pero no tanto como para cocinarlo varios dias a la semana. Al ver el tuyo me he acordado de mi abuelo, a él le gustaba con caldo, mientras que a mi siempre ha sido lo contrario. Mi madre en más de una ocasión ha dejado el sofrito hecho y yo también cuando teníamos que adelantar para el día siguiente, lo que no le hemos puesto nunca ha sido el toque canalla del ron, alguna vez he colocado cerveza, pero nada más. Este arroz es para comerse un plato calentito y disfrutarlo, ya que todo lo que lleva, aunque algunos sean restos, es producto de calidad, elegido con esmero. Superior.
ResponderEliminarUn beso.
Cocinar con antelación, es el pan nuestro de cada día en mi casa y en casa de mis padres, teniendo que llevar las dos cocinas para delante y con diferentes menús, porque no hay manera de cuadrarlos, es lo que hago desde hace años, preparo los fondos y cuando llega el momento, solo hay que añadir el arroz, las patatas, la pasta o lo que proceda. Me gusta planificar con tiempo lo que vayamos a comer, aunque también me gusta improvisar si tengo algo que no pueda esperar. Así que tu arroz me encantaría, con pollo y setas, que me fascinan. Yo tendría que añadir más arroz al guiso, porque seguro alguien repetiría.
ResponderEliminarBesos
Que guiso más rico, delicioso, reponedor...magnifico. Me ha encantado. Besos.
ResponderEliminarUummmmmmmmmm que ricura de arroz a mi me gustan mucho las setas y los arroces me rechiflan todos por que no puedo que si no estaba dando cuenta de un plato ya mismo ,te ha quedado de relujo y seguro que sabe mejor.
ResponderEliminarComo siempre una receta de 20 points ademas de ser de reciclaje ,nada como desperdico 0.
Bicos mil y feliz finde wapisimaa.
marisa , ese arroz debe estar super sabroso , la pinta lo dice todo
ResponderEliminarbesinos
Un autentico plato lleno del sabor que le dan los rebollones o robellones?.besinos wapa
ResponderEliminarMe parece delicioso ese plato de arroz con pollo y esos deliciosos robellons, ya sabes que las setas me encantan!!
ResponderEliminarUn besito y feliz fin de semana
Comprar rovellones a precio razonable ¡que suerte! Hoy en el super, costaba una cajita 30 euros, si bien yo también tuve suerte, por la tarde salí a ver arte rupestre y me encontré una buena cantidad al lado del camino,vine más feliz que una perdiz.
ResponderEliminarYo también había pensado hacerlos con arroz, porque también nos encanta. El tuyo se ve deliciosos y lo de en espera me ha encantado, al principio me sorprendió, pero leyendote ya no, de hecho yo lo hago siempres que se que voy a llegar con el tiempo justo para hacer la comida.
Y si hice un membrillo, pero no para el BBSS, por eso no lo encuentras. Fue un reciclaje con corteza de sandía, que también estaba muy bueno.
Besos bonita
Ay, Marisa! Bueno a mí la foto me encanta, y de solo verla se me hace agua la boca!
ResponderEliminarTengo un tema con los alcauciles (alcachofas) porque no sé limpiarlas así que solo los preparo hervidos y con aceite y vinagre, pero qué ganas de probarlos en un plato como este! Con eñ cariño de siempre, S
Acabas de crearme una necesidad imperiosa de comer arroz, éste, concretamente. Lo tiene todo para que esté buenísimo y me ofrece mucha curiosidad el sabor que puede proporcionarle el ron. Por aquí no hay aún níscalos (o al menos yo no los he visto en el mercado), pero si no me piden un ojo de la cara por ellos, ten por seguro que el día que los vea los compro y este arroz cae.
ResponderEliminarUn beso.
Bueno Marisa, me lo cocinas de la forma que mejor te venga, este arroz es un lujo, por ingredientes y porque sale de la mano de una valenciana que cocina de maravilla. Un resultado espectacular, para aplaudir. Un beso
ResponderEliminarMe encanta la idea y encima es de las recetas que siempre nos enseñan nuestras abuelas que quedan genial, de cuchareo ñam
ResponderEliminarbesitoss