Ensalada dulce de calabaza cruda

Estamos de vuelta y es 1 de marzo. Hoy hace un año nada más y nada menos, que Rosalía y yo, estrenamos nuestro proyecto Reciclando Sabores. Doce meses en los que hemos compartido con todos vosotros recetas en las que hemos reciclado muchos ingredientes a los que entonces denominamos, “los tristes de nuestra cocina”. Ingredientes que estaban ahí esperando a ser utilizados con el fin de crear nuevas recetas.

En todas ellas hemos intentado ser creativas y hemos disfrutado mucho cocinando, maquinando, compartiendo con todos vosotr@s nuestras recetas en Reciclando Sabores. 

Pero antes de seguir, no puedo dejar de hablar de Rosalía. Nuestra amistad se ha ido reforzando en la distancia  un AVE, Valencia-Madrid, que aún no ha partido, se ha transformado en montones de correos, muchos minutos al teléfono, comentarios compartidos en las redes sociales… pero sobre todo, mucha sintonía, generosidad, amistad compartida. Buenos y bonitos momentos en los que no hemos tenido nada más que satisfacciones. 

Mi receta nº 13 con la que comienzo este segundo año es una receta invernal pero a la vez fresca. Una ensalada dulce en la que utilizo la calabaza cruda junto a la naranja y otros deliciosos ingredientes.

Tenía una calabaza que había comprado ya cortada por la mitad en la verdulería. La vendedora me preguntó si quería probarla. Era la primera vez que me preguntaban algo así. Le dije que para qué y me contestó que era para comprobar que estaba dulce. Me dio un trocito y me sorprendió no sólo su dulzor, sino que además, así sin asar, ni cocer, estaba deliciosa.

Asé una mitad y dejé la otra en la nevera. Pasaban los días y me dije que algo tenía que hacer y así surgió esta receta de ensalada dulce. También encontré una naranja más viejecilla que las demás y junto con el resto de ingredientes, disfruté de esta ensalada para mí sola, llena de nutrientes y de sabores. 

La calabaza la utilizamos mucho en Valencia. Raro es el establecimiento, verdulería, panadería…en el que no encuentras una calabaza asada. También, dentro de nada, en las Fallas, son típicos los ricos buñuelos de calabaza.

La calabaza es barata y la podemos utilizar tanto en recetas dulces, como saladas. Tenéis más de una en el blog. Es una gran fuente de carotenos, betacarotenos, vitamina A y C, cumarinas, licopeno, ácido fólico… Tiene muchísimas propiedades y como la lista es larga, os dejo un enlace para los que tengáis interés en esta información. Como os he dicho antes, la he comido muchísimas veces, pero nunca antes cruda. A partir de esta ensalada dulce, pensé en otras posibilidades para utilizarla así y también preparé otra ensalada salada. 

Tanto la calabaza, como la naranja, aunque tienen se venden en el mercado en diferentes fechas, son frutas que se consumen especialmente en invierno. Aunque las podemos seguir encontrando, a partir de este mes de marzo ya van apareciendo otras frutas más primaverales. Por eso he llamado a mi ensalada, “adiós invierno”. En cambio la receta de Rosalía invita a dar la bienvenida a la primavera. Esta coincidencia es mera casualidad, cada una prepara su receta y solo vemos la de la otra unos días antes de la fecha de publicación.

Al ver Rosalía que yo con mi receta y mi título de la misma, despedía al invierno, lo comentamos porque yo también le dije que la suya con sólo ver la foto, me parecía de lo más primaveral y ella me dio la razón y modificó el título.

Espero que la probéis y sea de vuestro agrado. Podéis modificarla como más os guste. Yo me la comí de postre, pero también podemos ser atrevidos y tomarla antes de la comida.

Ingredientes (para un vaso grande)

- 70 g de calabaza cortada en dados pequeños
- 150 g de naranjas cortadas en trozos no muy grandes
- una pizca de jengibre picado muy fino
- 5 ml de zumo de naranja
- 2 cucharadita de sirope de ágave o de edulcorante
- una pizca de sal (opcional)
- nueces picadas
- gotas de chocolate

Preparación tradicional

- Trocear la calabaza y la naranja. Reservar.

- Trocear las nueces. Reservar.

- Rallar el jengibre.

- Exprimir la naranja y mezclar el zumo con el jengibre, el sirope de ágave o el edulcorante y la pizca de sal.

- Poner la calabaza, la naranja y en un bol o en un vaso. Verter el zumo aromatizado y dejar marinar una media hora a temperatura ambiente. (Yo no lo dejé marinar porque no tenía tiempo).

- Añadir las nueces y las gotas de chocolate.¡Disfrutad!

Notas:

- Preparé sólo un vaso. Las cantidades son orientativas porque podéis adaptarlas a vuestro gusto.

- La calabaza cortada en dados queda un poco dura. Sería mejor ponerla laminada. Es importante que tanto la calabaza, como la naranja, sean dulces.

- Si no os gusta el jengibre, también le puede ir bien la canela u otra especie.

- No le puse azúcar, pero se le puede añadir también o incluso, no añadirle nada.

- Las cantidades de nueces y de gotas de chocolate, os la dejo a vuestro gusto.

Bon profit!

Para finalizar, os presento la receta de mi amiga y compañera de Proyecto, Rosalía: Una receta de una rica y original Crema pastelera de frutas. 

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