Casi todos los dulces navideños que he preparado estas fiestas, han sido para regalar y alguno para casa pero no para mí. El otro día, vi en la herboristería a la que suelo ir, unas hermosas zanahorias moradas y compré unas cuantas. No pensé en ese momento qué iba a hacer con ellas, porque a mí, con darles algún mordisco, ya me gustan. Pero, una vez en casa, me apetecía un bizcocho y recordé los que tengo de calabacín e incluso con aguacate. No hizo falta darle más vueltas a la cabeza, iba a utilizar la zanahoria en un bizcocho, sin azúcar y sólo, sólo para mí.
Cuando era pequeña las veía en los bares en grandes recipientes de cristal. Cortadas en bastones, se conservaban en vinagre como encurtidos. Yo las hice un poco diferentes y las publiqué hace un tiempo, Zanahoria morada encurtida. No es la única receta que tengo en el blog con este tipo de zanahoria porque me encanta su sabor dulce y su color.
Hubo un tiempo en el que se puso de moda en algún blog y mucha gente la descubrió. No sólo se cultiva en mi tierra, también en otras zonas de nuestro país.
Creía que lo sabía todo sobre la zanahoria morada, pero no es así. Todavía fue capaz de sorprenderme una vez más y es por eso, que a este bizcocho lo he llamado bizcocho mágico. Si pincháis en el enlace de la zanahoria encurtida, veréis que al ponerla en vinagre, el color morado se transforma en un fucsia precioso. Para mí es normal, porque ya os he comentado que forma parte de mis recuerdos de infancia. Mi sorpresa fue al cortar el bizcocho. Creía que la miga iba a quedar oscura, pero no hubiera imaginado que el color era un ¡negro con tonos azulados! Tal vez en las fotos no se aprecia tan bien.
Si a mí que soy mayor, me sorprendió, imaginad que horneáis este bizcocho con niños y creáis un ambiente especial diciéndoles que vais a hacer magia. Les dejáis que colaboren en su preparación y les pedís que adivinen de qué color será el bizcocho. Seguro que se os ocurren más ideas para cocinar y divertiros juntos, a la vez, que comen verdura disfrazada o descubren que todas las zanahorias no son naranja, ni siempre lo fueron.
Mi bizcocho es sin azúcar, muy fácil de preparar; lo podéis tomar en el desayuno o en la merienda, de miga esponjosa y tierna. No se nota para nada el sabor de la zanahoria. Al igual que con otros elaborados con verduras, éstas confieren a la masa humedad y el resultado es excepcional.
¡Feliz noche y día de Reyes!
Ingredientes
- 150 g de zanahoria morada
- 185
g de azúcar de abedul o de azúcar
- 3
huevos L (55 g cada uno)
- 100 ml de aceite de girasol
- 200
g de harina de repostería
- una
pizca de sal
- 10 g de levadura química
- una pizca de sal
* un molde redondo de 20 cm de diámetro
Antes de empezar…
- Lavar las zanahorias, raspar la piel, quitar las extremidades y cortarlas en trozos.
- Tamizar la harina junto con la levadura y la sal.
- Sacar los huevos de la nevera para que estén a temperatura ambiente.
- Si el molde no es de silicona, como es mi caso, untarlo con mantequilla y espolvorearlo con harina. También podéis utilizar el spray desmoldante.
- Precalentar el horno a 170º si es sin azúcar y a 180º si es con azúcar.
Preparación en TMX
- Poner las zanahorias en el vaso y triturar, 3 segundos, velocidad 7.
- Añadir los huevos, el aceite de girasol y el azúcar de abedul o el azúcar. Programar, 10 segundos, velocidad 4.
- Incorporar la mezcla de harina y levadura tamizada y la sal. Programar, 10 segundos, velocidad 6.
Preparación tradicional
- Sin robot, rallar las zanahorias previamente.
- Verter todos los ingredientes en el vaso de un robot o batidora y batir hasta obtener una masa homogénea.
Horneado
- Verter la masa en el molde. Introducir el pastel en el horno precalentado a 170º si es sin azúcar y a 180º si es con azúcar. Hornear durante 40 minutos, calor arriba-abajo.
- Pinchar con un palo de brocheta para comprobar que está hecho. El tiempo de horneado dependerá del tipo de horno.
- Sacar el molde del horno y dejar que se enfríe el bizcocho antes de desmoldarlo.
Notas:
- Si no tenéis zanahoria morada, podéis utilizar zanahoria naranja, pero ya sabéis que el color cambiará totalmente.
- Se puede espolvorear con azúcar glas. Yo no le puse nada porque es sin azúcar.
Bon profit!
Os dejo un vídeo que me ha encantado sobre las zanahorias. Pinchad aquí.
En casa , los bizcochos de zanahoria son los que más gustan, pero nunca los he hecho con zanahoria morada y eso que es un color que me encanta. Jugaré con los peques a las cocinitas para que preparen este bizcocho que van a flipar.
ResponderEliminarBss
Elena
Hola Marisa!!
ResponderEliminarNos encantan los bizcochos de zanahoria y las zanahorias en general,las moradas nunca las he visto en el mercado la verdad. Este bizcocho me ha encantado tiene que estar delicioso y húmedo como me gustan, el corte es fabuloso..Bess
Marisa las zanahorias de colores llegaron a mi vida después de llegar a la blogosfera. Por aquí no se cultivan y en los mercados no las he visto nunca y ten por seguro que me habrían llamado la atención. Creo que has hecho muy bien en preparar un bizcocho sólo para ti ¡que a veces nos olvidamos de cocinar para nosotras mismas! Me encanta, no puedo decir más que eso porque es así de sencillo.
ResponderEliminar¡Felices Reyes y mis mejores deseos para 2018!
¡Qué curioso! Seguro es una reacción química, entre los pigmentos naturales y el calor, me gustan estas sorpresas que a veces nos llevamos cuando cocinamos algo por primera vez, es un poco arriesgado, pero si el resultado es tan espectacular, no puedes menos que sentirte contenta.
ResponderEliminarAunque conozco las zanahorias de colores, en el mercado donde compro habitualmente no las traen, tengo que desplazarme en coche a algún otro si quiero buscar algo más especial, pero merecería la pena solo por el placer de degustar tu bizcocho.
Besos.
Que color tan fabuloso!!!
ResponderEliminarEstupendas las zanahorias.
Un saludito
Hola Marisa, estoy deseando probar estas zanahorias. Todavía no las he comprado y la verdad es que les tengo ganas, tiene una pinta tremenda ! Feliz noche de Reyes :) petonets.
ResponderEliminarSi las zanahorias me encantan, este bizcocho me fascina, la miga negra es espectacular. Si que lo puedes llamar mágico con razón, porque viéndolo por fuera no te imaginas que va a tener ese color por dentro. Me imagino que estará super jugoso, porque los carrot cakes siempre lo están.
ResponderEliminarMe encanta tu bizcocho y tus zanahorias moradas, y yo también las recuerdo de la infancia. Lástima que ahora todas estas verduras tan auténticas sean un producto de lujo.
Mil besos, querida profe.
Feliz año Marisa!! no sabes las ganas que tengo yo de ver esas zanahorias porque no las he visto nunca, que bonito color le ha quedado a ese rico bizcocho, me gusta mucho.
ResponderEliminarSabes cuando leía lo que dices de el cambio de color al encurtirlas en vinagre, me ha venido a la cabeza que cuando hice por primera vez un brocoli morado hervido, cuando lo aliñaba con el vinagre cambio de color a rosa y eso mismo dije yo, es magia!! jeje.
Un besito
Que color tan bonito tiene... la pena es que por aquí no veo ese tipo de zanahorias, pero si las encuentro lo haré, es espectacular el contraste de colores!! Bs.
ResponderEliminarpero que bonic!!! se puede usar remolacha si no tenemos zanahorias moradas? besos
ResponderEliminarBon dia, Roser. Gràcies per comentar. Sí que pots utilitzar-la. El canviarà el color i no sé si és més dolça que la safanoria. Prova i adjusted el sucre al teu gust. Ja em contes.
EliminarUna abraçada.