Publico esta receta con mucha ilusión porque la horchata me encanta y no tenía la receta en el blog. En valenciano se llama “orxata” y por si no lo sabéis, la ciudad donde se produce la chufa (“xufa”) desde hace mucho tiempo y se puede tomar una rica horchata, es Alboraia, un pueblo de la huerta valenciana que ya está totalmente unido a la ciudad. Existen numerosos establecimientos, unos más famosos que otros, pero no por ello, la horchata está menos rica, y sí que cambia el precio. Con esta "orxata casera" sin azúcar, he preparado unos Fartons deliciosos.
Nunca he comprado horchata de super embotellada. No soporto el sabor. Mis recuerdos de infancia se remontan a la feria de mi pueblo y a la fiesta de S Antón en enero, incluso a las fiestas de moros en verano, en los que comprábamos chufas hidratadas. Nos las ponían en un cucurucho de papel de estraza y no las comíamos tal cual. Tengo que reconocer que desde que puse las chufas en remojo, he visitado la cocina a picar y comer alguna. Hacía tanto tiempo…
También mis recuerdos de la horchata están relacionados con comprarlas en las heladerías del pueblo. Eran heladeros que venían de Xixona, la ciudad del turrón y nos la servían con un cazo metálico. Deliciosa.
Existe una leyenda que seguro conocéis porque corre por internet que dice que la palabra “orxata” la inventó el rey Jaume I, que en un día de la reconquista de las tierras valencianas, gustándole mucho el sabor de la bebida que le sirvió una chica joven, preguntó el nombre de la bebida. La chica le respondió en valenciano: "això es llet de xufes" (esto es leche de chufas), y el rey le contestó: "Això no és llet, això és or, xata!" (esto no es leche, esto es oro, chata). No deja de ser una leyenda, pero es simpática.
Le he dado un toque personal, no todo el mundo le añade canela o limón, pero a mí me gusta.
Una vez leída la información que venía en el paquete (denominació d’origen xufa de València), leí con asombro que habla de las propiedades de la horchata sin azúcar. Escribo y traduzco literalmente lo que pone: La horchata contiene “arginina”, un aminoácido esencial, generador natural de la insulina, por lo que la horchata sin azúcar está altamente recomendada para los diabéticos.
Así que para darme el placer y seguir experimentando con la tagatosa, la he preparado con este edulcorante, porque reconozco, que sin azúcar, no me gusta nada y yo azúcar no puedo tomar. No se nota nada la diferencia.
A probar esta rica bebida muy fresca y espero que os guste mi receta.
- 250 g de chufas (peso en seco) y 280 g (peso tras remojo)
- 180 g de azúcar, o de azúcar de abedul o 90 g de tagatosa
- 1 litro de agua mineral muy fría
- ½ cucharadita de canela en polvo
- un trocito de piel de limón sin la parte blanca
Preparación en TMX
- Lavar las chufas, ponerlas en un bol y cubrirlas con agua y dejarlas en remojo 24 horas, cambiando el agua de 2 a 3 veces.
- Desechar el agua y lavar bien las chufas con agua. Después escurrirlas con la ayuda de un colador.
- Poner las chufas, el azúcar o la tagatosa, el limón y la canela en el vaso. Triturar 20 segundos, velocidad progresiva 5 /9. Tiene que quedar como una pasta espesa.
- Bajar los restos con la espátula y añadir el agua. Triturar 1 minuto, velocidad progresiva 5/9. Apoyar la mano en el cubilete por si se sale líquido por el bocal. Se saldrá seguro si la goma de la tapa no está en buen estado.
- Dejar en reposo en un bol cubierto con papel film para que macere de 2 a 3 horas, como mínimo a temperatura ambiente. En el paquete que compré, incluso habla de 24 horas y en la nevera. Yo lo he dejado todo este tiempo, pero creo que con 3 horas es suficiente. Este proceso potenciará el sabor de la horchata.
- Colar bien utilizando un colador cubierto con una gasa o con una servilleta fina de algodón. Ir presionando con una cuchara para extraer todo el jugo. Yo he utilizado el mazo de un mortero y me ha ido muy bien.
- Comprobar la textura para que esté a nuestro gusto y si nos gusta más líquida, añadiremos más agua o unos cubitos de hielo, volviendo a triturar 1 minuto, velocidad progresiva 5/9.
- Verterla en un recipiente. Yo utilizo una botella de cristal y la meto en la nevera.
Preparación tradicional
- El proceso es el mismo que con la TMX, pero se utilizará otro utensilio, una picadora, por ejemplo, o una batidora de vaso para triturar las chufas.
Notas:
- Es mejor consumirla en el día, no dejarla más de 24 horas y siempre en la nevera.
- Antes de tomarla, agitaremos la botella porque se forma un poso en el fondo.
- Se puede congelar.
- Si queréis utilizar en lugar de tagatosa, azúcar de abedul, pesaréis la misma cantidad que de azucar.
Bon profit!
Que tengo ya que decir de esta bebida celestial, pues todo lo has explicado tu muy bien.
ResponderEliminarMi madre ya la hacia en tiempos remotos, la colaban en un colador de rejilla muy fina, estaba hecho de manera, y entonces era muy costosa pues la machacaban en mortero y la colaban varias veces, así horas y horas,ahora con los aparatos que hay se hace rápido y fácil. Quita la sed bien fresquita, y es muy buena para el estomago, en fin todo bondades, besos.
Bienvenida. Ya te he devuelto la visita. Mira, me has enseñado algo que no sabía, que era buena para el estómago. Fabulosa la horchata. Un beso y nos seguimos
EliminarNunca probe orxata la verdad es que por aqui no suele verse...pero mandame un vasito de esos que seguro que me encantaria y fresquita uuuff...me pondreia las botas jaja..besitos
ResponderEliminarEs raro que no la vendan en tu tierra. Suele haber en las heladerías. Lo siento pero no me queda ni gota y si así fuera estaría muy mala, se conserva muy mal. Besotes
EliminarQue recuerdos me has traído con lo del cucurucho y la chufa hidratada, en épocas de feria o fiestas de los pueblos era tradición comprarse uno, ahora ya no se ve tanto, es una pena que se pierdan estas bonitas costumbres.
ResponderEliminarYo a veces compro y me la como y disfruto como cuando era niña y también a veces, cuando tengo tiempo, hago horchata, me encanta y como la que hacemos en casa ninguna, bueno casi ninguna, jejeje...yo no le pongo canela, la próxima vez probaré, a ver que tal, seguro que me encanta, porque la canela me gusta un montón.
Besetes!!
Sí que es verdad que es una pena que se pierdan las tradiciones y se han perdido tantas... La gente joven ya se lo ha perdido. Y mira que es una tontería comer chufas, sin más. Yo disfruté el otro día porque las iba robando del remojo y después al triturarlas con el resto de ingredientes tuve que parar porque sino, no hago horchata. Besetes
EliminarQue rica la horchata... a mi me compran las chufas de Alboraya,que aqui en el pueblo abusan y vale el doble... yo cuando la preparo hago litro y medio o dos litros asi la congelo y si viene visita, con 3 minutos de microondas la tenemos granizada y a punto....es importante el tiempo de reposo gana mucho en sabor...y este año que he aprendido a hacer los fartons, a la que le va a salir azucar es a mi...un abrazo amiga!
ResponderEliminarNo te preocupes Cris por el azúcar, espera la próxima receta que te solucionaré tus miedos. Ya me dices dónde compras las chufas, que las mías eran a precio de oro, como decía el Jaume I. besets
ResponderEliminarQue lujo me encanta la receta..................un bico
ResponderEliminarque buena y rica la horchata,me encantan todas tus recetas Marisa.
ResponderEliminarTenemos muchas cosas en común,me encanta la cocina y hace pocos meses me atreví y estrene un blog de cocina.
Un saludo y un abrarzo muy fuerte
Marisa he venido a ver tu receta, porque no me podía quedar con la intriga de cómo hacer la horchata tan apreciada por ti.
ResponderEliminarEstaba leyendo tus recuerdos, y me han parecido casi míos, yo también comía de pequeña las chufas hidratadas, que vendían en la feria, y te las servían en cartuchitos de papel, mi padre nos compraba un trocito de coco y un cartucho de chufas para cada una y nosotras lo disfrutábamos comiéndolas con fruición. También recuerdo cuando mi madre las compraba en la semillería de mi pueblo, y las ponía a remojo en el frigo, y nosotras a hurtadillas, íbamos cada dos por tres a coger unas cuantas chufas, ¡qué ricas y dulces estaban! Sin embargo la horchata, la probé cuando una tía mía, que vive en Tarragona, se la hacía a mis primos, y un verano nos mortificó, día sí y día también tomando horchata y desde entonces creo que dejó de gustarme, quizás no le ponía esa pizca de canela que tú le has puesto, y que a mí me fascina, porque no recuerdo que aquello que nos daba mi tía para beber ni siquiera oliese a canela.
En fin, ya sabes que las percepciones de una niña, distan mucho de lo que pensamos de adultos, así que la tengo que hacer yo misma, y así hablaré con conocimiento de causa, ja, ja, ja...
Besos y muchas gracias por la receta y por la historia, que me ha encantado, si es o no cierta, lo cierto es que tiene mucho encanto.