Si os digo que no tener tiempo para hornear pan me hace sentir mal, no es broma. Hace más de veinticinco años que lo hago y realmente ha sido un aprendizaje maravilloso del que me siento orgullosa. La masas de pan requieren paciencia y tiempo y cuando el resultado es óptimo, el disfrute propio y el de los demás está asegurado. El pan casero es más saludable que el comercial especialmente si no lo compramos en un horno tradicional y aunque yo ya no tengo necesidad de subir mi nivel de aprendizaje, hornearlo y comerlo, es siempre un placer. Me encanta regalarlo aunque en muchas ocasiones no han sabido apreciarlo porque no lleva prácticamente sal. La prohibición de tomarla fue la causante de ese emprendimiento y el inicio de mi experiencia, la cual no ha estado exenta de errores ya que sin sal, no es nada fácil manejar las masas, mucho menos si llevan masa madre.
Esa falta de tiempo me ha obligado a repetir varias veces la masa con yogur de esta hogaza la cual modifico a mi placer según las harinas que tengo o añadiendo semillas, como ha sido en este caso. Casi siempre mis panes son integrales o llevan un mínimo de harina integral ya sea de espelta o de centeno y éste último es el que le da una textura y sabor diferente.
En el listado de panes y masas podéis encontrar todo tipo de formas y tamaños, también ingredientes, pero siempre os digo que intento que sean lo más fáciles posible. La masa madre la tuve que abandonar y me pesa, pero necesita mucha dedicación por mi parte y no puedo dársela como merece al menos por ahora. Llegué a conseguir unos panes preciosos pero en esos momentos, me sobraba tiempo para experimentar. Lo dejo en pendientes… Y os recuerdo que creé un Aula de Pan para que sea de utilidad a los que llegáis aquí y os apetece conocer los básicos imprescindibles para perder el miedo a amasar y hornear.
Esta hogaza la horneé en abril y creo que quedó bonita, con la corteza crujiente, la miga densa y muy rica. La masa leudó un poco más de la cuenta y se abrió a su gusto pero, ¡qué más da! de eso se trata, de que cada pan casero sea diferente al anterior. Palabra de panadera casera.
Espero que os guste.
Ingredientes
- 200 g de agua
- 10 g de levadura fresca de panadería
- 400 g de harina panadera de trigo
- 70 g de harina de centeno
- 125 g de yogur natural
- 1 cucharadita de sal (no puse)
- 1 cucharadita de azúcar de abedul o azúcar
- 1 cucharada sopera de aceite de oliva virgen extra- 10 nueces
- 30 g de semillas de calabaza
* Bol para fermentar masa con gel calentador Tescoma 26,6 x 14,2 x 26,5 cm, 4 litros.
Antes de empezar…
- La noche antes poner las semillas y las nueces en remojo. Escurrirlas y secarlas antes de utilizarlas.
- Untar con un poco de aceite el Bol para fermentar masa con gel calentador Tescoma. Si hace calor, no es necesario calentarlo.
Preparación en TMX
- Verter el agua en el vaso, agregar la levadura y programar, 6 segundos, velocidad 4. Si hace frío, mejor programar 1 minuto, 37º, velocidad 1.
- Incorporar la harina panadera, la harina de centeno, el yogur, el azúcar de abedul o azúcar y la sal. Programar, 3 minutos, velocidad espiga. Quitar el cubilete pasado el primer minuto y seguir con el amasado. Agregar el aceite y volver a programar, 2 minutos, velocidad espiga. Comprobar que la masa se despega de las paredes. Después, es el momento de agregar las nueces y semillas y programar, 10 segundos, velocidad 4. Este último paso no es necesario si las nueces ya están troceadas.
Preparación tradicional
- Verter en el Bol de fermentación el agua (no toda por si no es necesaria) y la levadura de panadería. Disolverla y dejar reposar unos minutos. Reservar.
- Incorporar la harina panadera, la harina de centeno, el yogur, el azúcar de abedul o azúcar y la sal. Ir mezclando con los dedos hasta tener todo incorporado. Dejar reposar la masa durante 5 minutos y después agregar el aceite. Ir amasándola hasta obtener una masa lisa y homogénea. Si la masa se despega de las paredes del bol, estará lista. Después, es el momento de agregar las nueces troceadas y semillas e incorporarlas amasando.
Leudado
- Si no tenéis el Bol para fermentar masas , pasar la masa a un bol grande, taparlo con un paño de cocina y dejar leudar unos 30 minutos a temperatura constante (protegida de corrientes de aire).
- Pasado el tiempo, formar pliegues cada 10 minutos, estirando la masa desde los bordes al centro mientras se girar el bol con la otra mano en el sentido de las agujas del reloj. Repetir la operación tres veces.
- Después del reposo y los plegados, la masa habrá aumentado de volumen y estará mucho más manejable.
Formado, leudado y horneado
- Pasar la masa a una superficie espolvoreada con harina y estirarla desde los bordes al centro. Formar una bola y colocarla sobre una bandeja perforada o cubierta con papel de hornear. Taparla con un paño y dejar que vuelva a leudar. El tiempo dependerá de la temperatura ambiente.
- Poco antes de que finalice el tiempo de reposo, colocar un recipiente pequeño con agua en el fondo del horno y precalentado a 200°C.
- Una vez la masa haya leudado, proceder al greñado, cortando con una cuchilla o greñador, la superficie del pan formando cortes a gusto. Hice uno central y otros pequeños a los lados. Espolvorear con harina tamizada.
- Hornear durante 15 minutos, calor abajo y después, de 30 a 40 minutos, calor arriba-abajo. El tiempo dependerá del tipo de horno y del tamaño del pan. Retirar del horno y dejar enfriar sobre una rejilla antes de servir.
Bon profit!
Hola, Marisa.
ResponderEliminarAquí una que de masas entiende lo justito, pues hace años sí que me atrevía a hacer pan en casa, con bastante buen resultado, ahora y tras muchos años sin poder dedicarle a lo que, como bien dices, necesita de tiempo para obtenrr buenos resultados, además de ser un imposible para mi, solo compro pan en sitios donde lo siguen haciendo a la antigua usanza, aunque confieso que a veces lo compro en sitios, que aun siendo de calidad, de artesano tiene poco, pero es lo que hay. El año pasado, hice un intento de retomar la costumbre, incluso llegué a tomar fotos para compartirlo, pero hija mía, es que después del nivel que ponéis las que tenéis basta experiencia, me da pudor, para que me voy a engañar, no está mal, pero necesito mejorar, jajaja...
Ni te imaginas lo que yo daría por ser uno de los afortunados que han recibido cualquiera de tus panes, pues incluso siendo sin sal, o con poca sal, me encanta, siempre hay remedio para potenciar el magnífico sabor que tendrá, por el solo hecho de ser pan casero hecho con amor.
Besos y felicidades por este, que a simple vista, se mete por los ojos.
Buenos días, Marisa: no sabes la envidia que me das cada vez que traes un pan casero, pero me siento incapaz de hacer lo propio. Hace unos cuantos años lo intenté en un par de ocasiones, como panes no, pero como piedras dignas del Monasterio de El Escorial habrían tenido su punto 😂
ResponderEliminarEste pan de yogur tiene una pinta increíble, queda muy bonito y seguro que riquísimo. Por cierto, si tienes que regalar, aquí me presto a ayudarte porque no me importa que no lleve sal 😉
Besos.
Hola, Marisa
ResponderEliminarTe entiendo cuando dices que el no poder hacer pan, te hace sentir mal.
Cuando algo gusta y se disfruta, no puede faltar.
El pan te ha quedado increíble!! Justamente habría tu página y llegaba Dieter y lo ha visto.
Se ha quedado sorprendido cuando le he dicho que lo has hecho tú jeje
Realmente es un pan para disfrutarlo mucho.
Besos ♥
Hola Marisa, todos tus panes tienen una pinta impresionante y el valor añadido de ser caseros con lo que eso significa: más sanos, mucho más sabor (sabor a pan de antes), y el punto de mimo y cariño que una experta panadera como tu puede darle.
ResponderEliminarComo ya te han dicho para mi tampoco es un problema que no lleven sal, así que si te sobra alguno yo encantada de recibirlo, vas a tener que hacer horas extras para contentarnos a todas jajaja.
Besos
Buenos días Marisa. Aunque llego tarde porque he estado fuera, no me quería perder la visión de esta hogaza, ya que el paladar tiene que aguantarse. Me encantan tus panes, me gustaría tener tu habilidad para hacerlos, pero claro, nunca la tendré porque no lo intento, me parecen palabras mayores. Es preciosa de entrada y la imagino riquísima.
ResponderEliminarUn beso.
Hola Marisa!. Menuda hogaza de pan, esta para empezar y cuando te das cuenta te has comido medio pan, se ve una miga espectacular.
ResponderEliminarNo he probado nunca con yogurt, lo intentaré siguiendo tu receta.
Un fuerte abrazo querida amiga.
Me has antojado a hacer este pan, en cuanto haga un dia mas fresco me pondre a ello, se ve tan delicioso! Tengo un par de preguntas; porque has remojado las nueces y las semillas? y en un horno normal cuales serian las temperaturas de horneado?
ResponderEliminarBesos
Me parece que te gustará, Diana.
EliminarLos frutos secos es mejor dejarlos a remojo para mejorar la digestibilidad y reducir los antinutrientes. Eso favorece la absorción de minerales y vitaminas.
Ya me cuentas.
Besos y feliz domingo.
Hola , Marisa. Menudo pan¡¡¡¡ te ha quedado fantástico , ese corte se ve perfecto. La verdad es que ya me imagino su sabor. Se nota la mano que tienes después de estar horneando como dices 25 años. Te felicito. Besos
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